Anoche teníamos antojo de pizza para cenar, pero no tenía las masas enrolladas que utilizo como base ni las ganas de hacer la masa casera genuina.
Lo que si había en casa eran panes de pita y, total, tienen en común la primera sílaba, así que decidí hacer estas sencillas pizzas que permiten "pecar" sin cometer muchos excesos por su tamaño y están francamente deliciosas.
Los panes de pita se encuentran con relativa facilidad en los supermercados, en envases de 6 panes, pero podéis también utilizar los deliciosos panes de mollete.
Para 4 personas:
- 4 panes de pita
- 1 paquete de queso mozarella rallado especial pizza
- salsa de tomate frito casera
- 4 lonchas de jamón de york o jamón dulce
- 1 lata de champiñones laminados
- albahaca fresca (opcional)
- aceite de oliva virgen extra
Se precalienta el horno a 180ºC mientras preparamos las pizzas. Se cortan los panes de pita por la mitad, como si fuéramos a hacer un bocadillo y se disponen encima de un papel de horno en la bandeja del horno.
Se ponen un par de cucharadas de tomate en cada pita, se espolvorea el queso mozarella rallado por encima y se agrega el jamón picado y unos champiñones laminados.
Se introducen en el horno con calor arriba y abajo durante unos minutos, los necesarios para que el queso se funda y se dore un poco.
Se sirve inmediatamente decoradas con unas hojas frescas de albahaca y un chorreón de aceite de oliva virgen.
Martuka, buena idea la de usar panes de pita para la base. Yo alguna vez las he hecho con tortitas de maíz de las de hacer fajitas y también quedan muy ricas!
ResponderEliminarBlanca
http://acalablanca.blogspot.com.es/
Me encanta, una manera fácil y rica de hacer pizzas caseras y con un toque totalmente diferente.
ResponderEliminarBesos.