En mi pueblo -la Granja de San Ildefonso, Segovia, España- siempre se han cultivado las frambuesas. Mi madre siempre hablaba de un lugar en el que recogían las más ricas: la Casa de las Flores.
También allí existen unas pocas huertas en las que se cultivan los famosos judiones (unas fabes o judías secas gigantes) para hacer el famoso plato de puchero.