El pollo asado es un plato mundialmente cocinado. Es barato, nutritivo y admite muchos acompañantes. Creo que no hay país en el que no se prepare.
Esta receta tiene un paso previo de macerado que permite que la carne absorba sabores y además quede más jugosa al cocinarla. Al añadirle patatas en gajos, tomatitos y champiñones se convierte en un completo plato único.
Probad a hacer estos muslitos asados y ya veréis como os los piden más veces en casa!!
Para 4 personas:
- 8 muslitos de pollo
- 2 patatas medianas
- 2 cebolletas
- 1 bandeja de tomates cherry
- 150 g de champiñones
- 2 dientes de ajo
- 2 cucharaditas de pimentón dulce
- 1/2 cucharadita de curry
- 1 cucharadita de romero
- 1/2 copa de vino blanco
- aceite de oliva virgen
- sal y pimienta
Se limpian los muslitos quitándoles la piel, se lavan, se secan y se reservan.
Se prepara el macerado poniendo en un bol 2 cucharadas soperas de aceite, el pimentón, el curry, los ajos picados, el romero y la media copita de vino blanco. Se remueve todo hasta que esté bien mezclado.
Se salpimenta el pollo y se añade al bol del macerado. Se voltea el pollo para que se impregne bien. Se cubre con papel film y se deja en la nevera unas 3-4 horas.
Se cortan las cebolletas en 4 u 8 trozos. Se lavan las patatas y se cortan en gajos no muy gordos. Se lavan y secan los tomatitos. Se lavan con muy poca agua y se cortan en mitades los champiñones.
Se precalienta el horno con calor arriba y abajo a 220ºC (yo lo pongo en la función aire, si la tenéis en vuestro horno).
En una fuente apta para horno se pone un poco de aceite de oliva y en un lecho se disponen las patatas y las cebollas y se salpimenta.
Se saca el pollo de la nevera y se pone en la fuente. Se vierte el macerado por encima del pollo y las verduras. Se introduce en el horno durante 20 minutos.
Se saca del horno, se añaden los tomates y los champiñones y se asa 10 minutos más.
Se sirve espolvoreando el plato con perejil.
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